El abandono de los perros y la falta de adopción

El micro chips parece ser la mejor alternativa para identificarlos. De la totalidad de animales que ingresan al Imusa sólo la mitad encuentra un hogar para vivir

Pablo Salazar es el encargado de la administración, de colocar vacunas antirrábicas y de abrirles el portón a los vehículos que deseen ingresar en el turno tarde del Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa). Interpretó que entre el abandono y la falta de adopción arriesgan a que el animal que esta en la calle este expuesto al maltrato de no tener un hogar, a la mala alimentación, a la actitud de la gente y de su propio instinto. “No hay que olvidar que el perro es un animal y que defiende su territorio”, comentó.

El abandono de perros “es un gran problema, porque no distingue clases sociales y no depende de la raza”, aclaró Salazar. Al Instituto ingresan cuatro animales por día y se adoptan dos; una desproporción del 50 por ciento. También se realizan 40 operaciones de castración por día, más la atención sanitaria que merecen. El eje central del Imusa es la castración de hembras y machos para controlar la natalidad.

Ser un perro comunitario requiere del hábito alimenticio y de higiene llevada adelante por los vecinos. Además de la característica de ser “el bueno del barrio”, mantener una conducta y tener la carpeta sanitaria (esterilización, vacunación y desparacitación). Al Instituto Municipal de Salud Animal ingresan más de 1200 animales por mes, acercados por la gente, los proteccionistas o los en cargados del Instituto los van a buscar.

En su escritorio se encuentran carpetas con los nombres de adoptame, vacunación antirrábica y los boletos de bono contribución, se vacuna contra la rabia, se desparasita y esteriliza gratuitamente. En la pequeña recepción junto a los bancos de espera se encuentran cuatro gatitos recién nacidos, blancos con manchitas negra, no paraban de maullar. Junto a este sonido se escuchaba el teléfono, una llamada tras otra; todas atendidas por el encargado del turno tarde que con paciencia y vocación realizaba todas estas tareas simultáneamente. Siendo un empleado municipal.

Imusa: Instituto Municipal de Salud Animal

Dirección: Francia 1940

Teléfonos: 4805463 /4314048

Días y horarios de atención: Lunes a Viernes de 8 a 18. Solicitar turno para esterilización telefónicamente.

El Instituto Municipal de Salud Animal atiende no sólo a animales de la calle sino también aquellos que poseen dueño y necesiten tratamientos antisárnicos,vacunación antirrábica, desparasitación y esterilización, no siendo un hospital.

Trabaja también para concientizar acerca de la coexistencia hombre–animal–medio ambiente, informando acerca del cuidado de los animales y del rol del médico veterinario en el mismo, la prevención de Zoonosis, la difusión de los aspectos beneficiosos de la tenencia de una mascota, creando conciencia cívica y educación sanitaria en la población.

Ellos implementaron usar caravanas con números, pero no les dio resultados porque se salía fácilmente. También utilizaron el “room” un programa informático donde ingresarían las bases de datos de los animales, “no es muy costoso pero tampoco se invierte”, dijo Pablo Zalasar. Comentó además que la implementación del microchip en los perros esta dando vueltas hace años, pero como el gobierno no tiene presupuesto para implementarlo, lo hace un privado. Y para finalizar expresó: “Al micro chips lo tiene que manejar el Estado par tener una sola base de dato completa, no sirve identificar por sector”.

Carlos Cossia hace cinco años que viene implementando el microchips en los perros comunitarios con un costo de 30 o 40 pesos cada uno. Es una inyección que se coloca debajo del brazo del animal, “sin causarle ningún dolor, ni infecciones, ni canceres”, explicó el doctor. El micro chips es un material informático que tiene el tamaño de un arroz en donde pueden guardarse datos sanitarios, edades y propietarios del animal. Conservando cada uno un número que en caso de que el animal se pierda este se detectaría a través de un lector de códigos.

El doctor Cossia comentó además que la ordenanza 7445 declara que todos los perros de la calles tienen que estar identificados, “pero el gobierno no hizo nada”, admitió. “El micro chips es la mejor manera de identificar a un animal, es un material informático inviolable, que contiene una información veraz”, aclaró.

“De esta manera se sabría a través de las bases de datos que contiene el micro chips si un perra esta castrada y no habría que abrirla para darnos cuenta. Evitaríamos una operación”, ejemplificó. “Es una manera más de controlar a los propietarios, con sólo pasarles el lector de códigos sabríamos quien es su dueño y procederíamos a sancionarlo por el abandono, el maltrato o lo que corresponda”, definió el doctor Cossia.

El proteccionista Enrique Ojeda piensa que el abandono y la falta de adopción crecen por la ignorancia y el desinterés de la gente. “Hay muy pocos voluntarios o proteccionistas par tantos casos” y comentó que la gente se queja pero no denuncia. “La ley 14.345 esta para que se cumpla, si alguien maltrata a un perro hay que denunciarlo porque va preso”, vociferó.

Enrique Ojeda hace mas de cuatro años que pasea perros del Imusa tres veces por semana, lo hace por voluntad propia. “Uno con salvar un perro se contenta”, expresó y aclaró que en el Instituto Municipal de Salud Animal no se mata ningún perro, el trabajo es gigantesco. “La gente cree que la perrera sigue existiendo pero hace más de 16 años que ya no existe”, definió. Y determinó que para poder hacerse cargo de un animal hay que poseer una “tenencia responsable”.

Ser un tenedor responsable es asumir un compromiso para su atención. Los dueños son los responsables de sus animales. El abandono de las mascotas es un acto cruel que vulnera los derechos que tienen las mascotas de ser respetados como seres vivos y que afecta a la sociedad por lo cual no se puede desconocer la necesidad de implementar programas de salud pública que prevengan estas conductas indeseables.

Así es como bajo el lema "Adopte uno, hasta que no quede ninguno” se ha implementado una importante Campaña de adopción de animales domésticos. Previo control sanitario del animal, se procura la búsqueda de un hogar y dueño responsable. El IMuSA ofrece en adopción a perros y gatos en su sede o en los distintos puntos de la ciudad donde realiza sus operativos. Aproximadamente se adoptan 75 a 80 animales por mes.

Esta campaña se refuerza a través del trabajo con las instituciones intermedias de la ciudad, principalmente las escuelas. Se aborda así el problema social que implica los animalitos en la calle, los accidentes que bajo esta situación pueden ocasionar y el estado de enfermedad en el que muchas veces se encuentran.

Esta tarea de promoción y concientización del cuidado responsable de las mascotas es acompañada por visitas guiadas a las instalaciones del IMuSA. El vínculo que se establece con niños, adultos y ancianos lleva implícitos fuertes lazos de unión, comunicación, compañía y afecto, con múltiples alicientes como lo demuestra la zooterapia como apoyatura en el mejoramiento físico o psíquico.

Cada vez es más común ver perros al caminar por la vereda, al cruzar la calle; en el hall del edificio y en las plazas. Los cuales están descuidados, desprotegidos, sin las condiciones sanitarias básicas y sin un hogar. Expuestos a cualquier daño, maltrato de la gente, mala alimentación, cambios climáticos y a su propio instinto.

Estan expuestos a enfermedades como la Leptospirosis que se transmite al hombre al entrar en contacto con agua contaminada por orina de perros, caballos y ratas. Que se previene con una vacunación anual. El Moquillo canino, la Hepatitis canina infecciosa; el Parvovirosis, la Corona canina y la Tos de las perreras son enfermedades exclusivas del animal y no se transmiten al hombre. Sólo hay que consultar con tu veterinario para que indique el plan de vacunación a seguir.