La baja del alumnado en escuelas céntricas es notable

El comedor y los talleres son una herramienta más de inserción estudiantil

A pesar de los esfuerzos que llevan adelante los consejos directivos de cada escuela con la implementación de comedores, talleres y la cooperadora, disminuyen las matrículas escolares. Respecto a las causas de la disminución del alumnado, la directora de la escuela nº 103 Dr. Roque Sáenz Peña y profesora de ciencias de la educación, Florencia Seravallez, dio sus argumentos. Por un lado el continuo movimiento de vecinos que dejan el centro, luego que las escuelas eligen sus alumnos y por último la no utilización de gestiones adecuadas por un equipo con compromiso pedagógico.

Alicia, la bibliotecaria de escuela nº 103, dijo que es un tema que pasa por muchos lados. Tanto por lo social y lo económico como por lo familiar. Comentó que los padres no se ocupan de los chicos y bramó que el 80 por ciento son huérfanos con padres. Además expuso que los maestros tienen un nivel más bajo de educación y que ya no existe en casi todos los casos la vocación. Estudian magisterio por la rápida salida laboral.

La escuela Dr. Roque Sáenz Peña tiene 210 alumnos, de los cuales un cincuenta por ciento es de zona céntrica y la otra mitad de zonas aledañas (porque los padres trabajan en la cercanía). Sumado a esto la cooperadora ayuda a los chicos que no tienen para el transporte y para sus zapatillas. El comedor escolar es una de los agregados que se incorporaron en las escuelas. Al principio esta medida era tomada en los barrios carenciados, dándoles por la mañana el vaso de leche, luego el almuerzo y la merienda. Medida que también tuvieron que implementar las escuelas del centro de la ciudad.

Florencia Seravallez comentó que hace seis años se sacó el turno tarde en la escuela nº 103, ubicada en Sarmiento 300. Y que a partir del 90 las escuelas céntricas fueron perdiendo matrícula. Un claro ejemplo es esta institución donde funciona la sala de 4 años y de preescolar hasta séptimo grado sólo en el turno mañana. Por la tarde funcionan 15 talleres que forman parte del proyecto del “horario extendido”, así llamado por el municipio. Los talleres son de reciclado, de danzas, de entretenimientos y de integración grupal. Llevan los nombres de “madera y cartón”, “folklore”, “ajedrez”; “inglés”, “francés” y “reciclado”.

La escuela cumple un rol importantísimo, mantiene a los chicos ocupados y alimentados por casi doble turno. Les generan posibilidades y oportunidades a los alumnos para que no estén todo el día en la calle o dando vueltas por el barrio. Brindarles tranquilidad a los padres mientras que trabajan o realizan sus tareas del hogar. El comedor y los talleres se agregan a la educación para mantener la matrícula y a los chicos dentro de la institución. Pero la baja del alumnado es notable, por la gran variación de políticas, ninguna de ellas estables. Al comenzar una gestión nueva se empieza de cero en vez de continuar el proyecto de la gestión anterior. Este vaivén provoca desequilibrio y desmorona la organización conseguida, porque política y educación van de la mano.

Por: Aguilera, María Celeste